Verlo todo tras sus ojos,
esconderme en su mirada
que permanece a ratos asustada
curiosa y alerta
traslúcida como una ventana.
Así como si nada
llegaste a mi
en busca de
cobijo.
Perro flaco,
silencioso
hoy compartes mi camino.
Ahora veo tras tus ojos
y aprendo los días,
los gestos,
los olores,
y sonidos de esta vida.