Aire espeso,
estéril
y pesado
como el harmatán que se
respira.
Tiempo robado,
invasión en vida
de respiraciones
y alegrías
Descarga eléctrica
de obligaciones impuestas
que se expande,
me invade,
me hace trizas.
Exigencias verticales
por narices
o a la salida.
Frases avispa
vestidas de halagos
que ni engañan
ni encandilan
Ninguneo manifiesto
apropiación indebida
de mi cuerpo
de mi tiempo
y de mi misma.
Quisiera elevarme
suspenderme en este aire
denso
como la mantequilla
alejarme de este suelo
y sus gentes
imán de mi energía
que me crispan
que me enervan
y me sacan de mis casillas.
Inhalaré este éter
cetrino y yermo
a medida
que me voy preparando
una tila...